Sinopsis:
Clary Fray desearía que
su vida volviera a la normalidad. Si pudiera dejar atrás el mundo de los
cazadores de sombras, tendría más tiempo para Simon, su mejor amigo, que se
está convirtiendo en algo más... Pero el mundo subterráneo que acaba de
descubrir no está preparado para dejarla ir; en especial ese apuesto y
exasperante Jace. Para complicar las cosas, una ola de asesinatos sacude la
ciudad. Clary cree que Valentine está detrás de esas muertes, pero ¿cómo podrá
detenerle si Jace parece dispuesto a traicionar todo en lo que cree para ayudar
a su padre? En esta soberbia secuela de Ciudad de Hueso, Cassandra Clare
arrastra de nuevo a sus lectores a las siniestras garras del Submundo de Nueva
York, donde el amor jamás está a salvo y el poder se convierte en la tentación
más letal.
Puede contener spoilers.
Primero que nada, confieso que este libro no me ha gustado mucho -si lo comparamos a cuánto me gustó el anterior, pero de todas formas me gustó.
Aquí nos encontramos con Clary, nuestra protagonista de la que no tengo el gusto de agradarme, quien ahora vive en casa de Luke, el mejor amigo de su madre y quien es su única figura paterna. Ella está más que confundida, pues a pesar de que sepa que Jace es su hermano, Clary no puede evitar seguir amándolo, pero a la vez, se ve atrapada entre una relación con Simon que sucedió repentinamente y ella no está segura de si en serio lo quiera de esa forma. Y cuando Jace es botado del instituto con órdenes de no volver a ensombrecer la casa, él se mete en una pelea con una manada de lobos y Clary está más que preocupada por Jace, pero no tiene idea de cómo ayudarlo, pues Jace se muestra reacio de aceptar que lo ayuden.
Pero, entonces, por un mensaje de texto de Isabelle, ella se entera de que La Inquisidora se lo ha llevado y se encuentra encerrado bajo la supervisión de los hermanos Silenciosos, ya que creen que él podría ser un espía de Valentine. Una noche, Jace escucha unos ruidos y cuando trata de sabe qué es lo que pasa, él descubre con horror que han asesinado a los hermanos Silenciosos, y el causante no es nada más ni nada menos que su mismo padre, quien además, roba la Copa Mortal.
Ahora la Inquisidora aprovecha la situación para echarle la culpa a Jace de ayudar a Valentine a ayudar a robar la copa y matar a los hermanos. A él no le queda de otra que aceptar la invitación de Magnus para irse a vivir a su apartamento. Y tanto ellos, como Clary, Simon, Alec, Isabelle y Luke, deberán descubrir cuáles son los nuevos planes de Valentine.
Bueno, la verdad es que me esperaba un poquito más de éste libro, pero tampoco ha estado mal. Sí, tiene mucha acción y puede que algunos personajes aquí me hayan gustado más que antes, pero es que el anterior, Ciudad de Hueso, fue tan increíble y en cambio, Ciudad de Ceniza, ha sido muy bueno, pero no más que eso.
Clary, la protagonista, sigue sin caerme del todo bien. No sé, la encuentro muy insensible, sobretodo cuando le espeta una sarta de estupideces a Isabelle en el funeral de Simon, y ella sólo quería ayudarle. A veces se me hace que exagera de terca y berrinchuda, pero bueno, ¿qué se le puede hacer?
Simon, por el contrario, me ha encantado más. ¡Es tan lindo! Me parece una excelente persona, un amigo incondicional y un joven de lo más tierno. Además, es el personaje más real de todos, desde mi punto de vista - aunque también Jace me lo parece.
Isabelle ha estado mejor, aunque tampoco acabo de simpatizar con ella. Alec me ha gustado más que en el primero, ha sido tan tierno y amable, sobretodo en las escenas que comparte con Jace, pero se me hace algo feo que no acepte sus sentimientos por Magnus. Vamos, que el brujo le encanta y él en el fondo lo sabe.
¡Magnus me ha fascinado! Bien, siempre me gustó, desde el primer libro, pero en cada momento en el que ha aparecido, me ha encantado más y más. Ah, y me enterneció la última escena con Alec, cuando le pide su energía para recuperarse.
Y Jace... ¿Qué puede decir -escribir- de él que ya no se haya hecho antes? Él es... simplemente, para mí, el mejor personaje de la saga. Dios, lo amo. Jkjfdhdksj me recuerda taaanto a mí. Su sarcasmo, joder, amo su sarcasmo. Tiene ese humor tan negro y eso me encanta. Sus frases son tan ingeniosas, y siempre me sacan carcajadas. Adoro su arrogancia, porque al menos está consciente de su atractivo físico y no finge modestia -cómo odio cuando hace eso. Me encanta lo valiente y leal que es, pero más que nada, cómo se muestra de incondicional con Clary.
En otras palabras, Ciudad de Ceniza es un gran libro, el cual está lleno de mucha acción, te cortará el aire con las últimas páginas, y te sacará más carcajadas que su anterior entrega. Éste, sin duda, marca el inicio de muchísimas más sorpresas y aventuras para los siguientes libros. Amarás a los personajes, especialmente a Jace, quien es el que más te fascinará con su gran encanto y sarcasmo.
Puntuación:
4/5
